Pruebas de validación de sistemas eléctricos
Son simulaciones que involucran tanto componentes físicos reales como gemelos digitales, que permiten evaluar el desempeño de diferentes infraestructuras de control y adquisición de datos, comunicaciones, monitoreo, gestión y aplicaciones especializadas en un entorno controlado y seguro.
Las pruebas HIL permiten verificar el correcto funcionamiento de sistemas complejos y críticos para la operación de infraestructuras eléctricas, ejemplo:
Sistemas de adquisición, datos y monitoreo de parámetros eléctricos en tiempo real
Desarrollo de nueva tecnología para las redes inteligentes
Sistemas de control y monitoreo de microrredes y sistemas HVDC
Sistemas de protección y control de subestaciones eléctricas
Sistemas de gestión de energía y aplicaciones especializadas
Beneficios
Ahorro de tiempo:
La simulación de tiempo real permite acelerar los procesos de desarrollo garantizando que los sistemas estarán rigurosamente probados y optimizados antes de su implementación final.
Reducción de costos:
Los sistemas reales suelen ser mucho más costosos de implementar y operar que los simuladores de tiempo real. Desarrollar y realizar pruebas HIL resulta mucho más económico que hacerlo directamente en el sistema físico.
Reduce los riesgos y aumenta la seguridad:
Permiten realizar pruebas que podrían poner en riesgo la vida de las personas o los sistemas reales si se hicieran directamente en ellos. Se pueden inspeccionar y optimizar incluso los escenarios más peligrosos sin preocupaciones.
Objetivo
El objetivo de las pruebas HIL es asegurar que los sistemas y aplicaciones funcionen de manera segura y eficiente, cumpliendo con los requisitos de desempeño y calidad definidos por el cliente. Además, permite detectar y corregir posibles fallas o errores en la etapa de diseño y desarrollo, reduciendo el tiempo y los costos asociados a las pruebas en campo.